La abrumante naturaleza ibicenca esconde uno de los restaurantes más recomendables de la isla: La Paloma. En una finca payesa ubicada en Sant Llorenç, este establecimiento presenta una atmósfera muy familiar en un espacio amplio y agradable.
A mediodía, La Paloma elabora un menú a base de ensaladas y gastronomía oriental, mientras que por la noche la carta se transforma para dar pie a platos mediterráneos e italianos elaborados con productos recién cogidos del huerto propio. Para poner la guinda, coctelería para relajarse bajo las estrellas.