Los crepes son la especialidad en el restaurante del Hotel Rocamar. Los hacen como nadie a su alrededor y tienen una gran variedad, tanto dulces como salados. Llaman la atención los crepes de boloñesa y los de espinacas a la crema con queso. Y, entre los dulces, resulta irresistible el Crepe Rocamar, elaborado con plátano, dulce de leche y nata. Hay que ser prudente con el Suzette, un crepe con zumo de naranja y Cointreau, y con el de manzanas al ron, ¡pues están tan ricos que puedes perder el control!
La carta es atractiva y muy contundente, con platos sencillos y más elaborados
Si alguien pudiera cansarse de probar tantos y deliciosos crepes, podría elegir entre otros de los sabrosos platos de su menú. En estos casos el pollo al curri, las hamburguesas y la ensalada césar son los más ordenados. Los más comprometidos con su nutrición también encontrarán platos de su elección, como la ensalada de quinoa con brotes tiernos, lentejas, maíz, tomate y aguacate, la tabla vegetariana con hummus, tapenade, crudités y verduritas de temporada, zumos y batidos naturales. También tienen bar, y para los más pequeños tienen un apetecible menú infantil.