Toya Montoya desprende paz y armonía por cada poro de su estilada figura. Ecologista activa y convencida ha encontrado su segunda familia en Ibiza donde es feliz.
¿Qué significa para usted ser embajadora de Adlib 2018?
Definitivamente es un honor , la verdad es que me cogió un poco por sorpresa por el hecho de ser colombiana y no tener raíces españolas, aunque llevo mucho tiempo en la isla y parte de mi corazón está aquí, me parece un merito mayor. Me llena de emoción ser embajadora y dar a conocer todo el talento que hay e Ibiza, en España y también en Colombia y el mundo.
¿Cómo será su labor?
Estuve en Colombia haciendo mucha prensa, mucho bombo y bulla, como decimos allí, dando a conocer todo lo que se hace aquí, que se hace con el corazón. Siento que todas las prendas Adlib están hechas con mucho amor, a mano, con pasión, esmero y detalle. Las personas que trabajan se dejan el corazón en cada pieza. Que mayor orgullo poder mostrarlo y ser la imagen y la cara de esta edición.
Internet es una plataforma herramienta y para comunicar y tener cercanía con la gente»
¿Qué significa en su carrera?
Supone algo impresionante, es la primera vez que trabajo oficialmente en España. Es un éxito, algo grande, un gran logro y un salto. Ser colombiana y representar a todo este grupo de talentosos diseñadores ibicencos es un honor y estoy segura que para todos los colombianos es algo muy bonito. Cuando empecé a contarlo la gente se sorprendió que les representara.
¿Cómo ocurrió todo?
No sé muy bien cómo sucedió. Jordi Gómez, un gran fotógrafo al que admiro y con el que he tenido una relación muy cercana y amistosa, me postuló y puso encima de la mesa la posibilidad de ser una de las opciones para embajadora de Adlib. Le debo el que haya insistido para que me tuvieran en cuenta, gracias a él estoy aquí y hemos hecho un magnífico trabajo con el catálogo. Fueron tres días exhaustivos en los que nos divertimos mucho y exploramos sitios de la isla.
¿Proyectará la imagen de Ibiza en su país y Sudamérica?
Eso también es interesante para la gente de Colombia y de Sudamérica para que conozcan los vestidos y el diseño y también la esencia de los maravillosos lugares emblemáticos que tiene Ibiza.
¿Ha descubierto nuevos paisajes o los conocía ya todos?
Llevo ya seis años aquí y soy muy curiosa, me gusta indagar en los sitos donde vivo y ya conocía todos los lugares a los que fuimos. Estoy segura que hay muchos por descubrir pero en estos ya había estado.
¿Cuál es su vínculo con la isla?
Comienza hace 12 años cuando vine por primera vez. Era muy joven y vine solo para tres días con un grupo de amigos que querían conocer la fiesta ya que la isla es conocida mundialmente como la meca de la fiesta. Me enamoré de la isla y tuve la oportunidad de ver un poco de sus encantos. Hace seis años viene a pasar quince días y me enamoré de este lugar y de una persona que vive aquí por lo que gran parte de mi corazón está aquí. Tengo muchos amigos que han venido a vivir aquí y nuevos amigos. Siento que tengo otra familia ibicenca.
¿Qué diferencia hay entre hacer pasarela o modeling en Colombia o Sudamérica y en hacerlo en Norteamérica o Europa?
El estereotipo es diferente, la mujer latina es más voluptuosa, sensual y sexy. Hay un poco de todo en Latinoamérica pero la moda europea es más estilizada, elegante, de mujeres más delgadas. Sin embargo Adlib es una moda que podríamos usar mucho en Latinoamérica, porque le queda bien a cualquier persona y como latinas nos identificamos mucho porque es una isla, y como en Colombia no hay estaciones, tenemos Caribe y Pacífico, hay mucho clima cálido y la gente utiliza ropa muy orgánica, libre y natural con telas blancas, encajes, como Adlib.
Pero las modelos brasileñas son las más solicitadas del mundo. ¿Es otro estereotipo?
Hay que verlo desde otro punto. Pero definitivamente la modelo latina es más voluptuosa y sexy.
¿En qué proyectos trabaja?
Estoy viajando siempre en un avión entre Colombia y Eivissa. Ahora estoy poniéndole mucho corazón a marcas que sean autosostenibles, que tengan muy presente el cuidado y la preservación del medioambiente y estoy trabajando en un canal de viajes que he creado para poder compartir con la gente esos lugares que a mí me llenan. Es la relación que tengo con gente de distintos lugares más allá de los consejos de viajes, trato de enseñar a la gente cómo funciona, cómo nos relacionamos y las distintas culturas que hay en el mundo.
¿Es un canal de televisión o de internet?
Es un canal de Youtube. Llevo tiempo en Colombia trabajando en televisión con proyectos muy puntuales. Presiento que en la era digital uno tiene un poco de autonomía para hacer lo que quieras, no tienes que esperar a que un programa de televisión te apruebe o no lo que quieres realizar. Uno tiene la libertad de comunicar y hacer lo que quiere, siendo un poco más honesto y fiel a lo que uno piensa.
¿Por qué las modelos jóvenes actuales son ecológicas, aprecian la sostenibilidad y están más concienciadas con el medioambiente y lo que ocurre a su alrededor?
Es casi como un deber, ya no tenemos escapatoria. Mi generación y las que vienen tienen el chip de cuidar el planeta, este es el único lugar que conocemos hasta el momento donde podemos vivir y reproducirnos y somos conscientes de eso. Parece que somos 100% inconscientes de lo que sucede. Le quitamos todo a la naturaleza y no pensamos que se acabará si no lo cuidamos y hacemos pequeñas acciones o grandes acciones, porque todo suma.
«Ser ecologista es casi un deber. Mi generación y las que vienen son conscientes de que hay cuidar el planeta»
¿Cómo ve la modelo virtual de internet, la que tiene más seguidores que trabajo? ¿es efímera?
Es una plataforma y una herramienta para comunicar, es un medio importantísimo para tener esa cercanía con la gente que te sigue y poder mostrar realmente quién eres. Las redes sociales tienen una parte muy positiva pero considero que tienen una parte tremendamente negativa. En las redes sociales solo se habla de la perfección, de nuestras vidas perfectas y felices. Estamos obligando a las nuevas generaciones a ser felices. Me parece algo erróneo, como humanos tenemos momentos malos y difíciles.
¿Es felicidad virtual y ficticia?
Hay gente que tiene miles de problemas y en las redes sociales pintan estar felices. Tenemos la responsabilidad, como figuras públicas de mostrar que eso no es así, como seres humanos tenemos nuestras alegría y tristezas. Como humanos tenemos que reconocer esa parte y hacerlo normal. Hoy en día hay mucha gente con ansiedad y depresiones y es precisamente por ese bombardeo de tener que ser feliz, tener una vida perfecta, un cuerpo perfecto y mil cosas materiales que no te dan la felicidad.
¿Cómo se puede cambiar?
Hay que reorientar las redes sociales hacia lo real y pronto voy a enfocar las redes sociales hacia eso y hablar un poco de ese tema para volvernos personas reales, no solo tenemos que mostrar lo maravilloso y bonito, que por supuesto está en nuestras vidas, pero también existe la otra parte.
¿Hacia dónde enfoca su carrera; a ser actriz, u otros mundos?
Llevo dieciocho años trabajando como modelo, lo que es una carrera bastante larga. Se cumplen ciclos y uno con el tiempo va evolucionando. No quiero ser actriz. Ahora quiero ser fiel a lo que pienso y siento y que lo que haga sea coherente con este pensamiento. Me gustaría trabajar con marcas que tengan ese mismo interés y conciencia medioambiental. Tengo un proyecto que va por ese camino.
O presentadora que ahora están tan de moda en su profesión.
Me gustaría presentar programas que estén enfocados hacia esa parte porque todos tenemos la responsabilidad de hacer algo. La vida ha sido muy buena conmigo y uno tiene que retribuirle a la vida, de alguna manera, todos los éxitos que le ha dado.
De todos esos vestidos fantásticos que ha vestido en la pasarela Adlib ¿con cuál se quedaría?
Me los llevaría todos. Y si pudiera ser dos de cada uno para que no se estropeen nunca.
¿Con qué sueña Toya?
Sueño con la paz interior.