Magia, gastronomía creativa, armonía y romanticismo se funden en los enlaces que se celebran en el Hotel Can Curreu, en Sant Carles, y en el restaurante Estel, en Santa Eulària. Con la misma filosofía de ofrecer el mejor servicio, representan la faceta de naturaleza interior y la versión marinera de un concepto que traspasa fronteras.
Estel es el lugar perfecto para celebrar el banquete de cualquier evento, especialmente si se trata de una boda. La elegancia y el lujo imperan en un restaurante en el que la decoración se mimetiza con el gusto de las parejas, que pueden adaptar los espacios a su antojo para conseguir la celebración más original. Situado en pleno paseo de Santa Eulària, Estel aproxima el Mediterráneo al evento con unas vistas de excepción.
En Can Curreu, es posible celebrar la ceremonia en un jardín presidido por un olivo milenario, rodeado de naturaleza. Deja huella en novios e invitados el momento del cóctel en la zona de la piscina con increíbles vistas al valle y la puesta de sol. La noche puede alargarse con buena música y barra libre hasta la madrugada, antes de que los novios lleguen a una de las excelentes habitaciones.