Rosa María Sáinz Peña trabaja como gerente de publicaciones en el área de cultura digital de la Fundación Telefónica. En sus más de veinte años de experiencia, ha desarrollado su profesión en temas de comunicación, impacto social de las nuevas tecnologías y cultura digital.
¿Cuáles son las principales líneas de actuación de la Fundación Telefónica?
Trabajamos en cuatro ejes: la educación, la empleabilidad, la cultura digital y el voluntariado corporativo. Apostamos por la calidad educativa como vehículo de transformación social. También apoyamos a los jóvenes en su búsqueda de oportunidades laborales. En el campo de la cultura, fomentamos la creación de conocimiento y el desarrollo de las expresiones artísticas de una sociedad digital. Finalmente, canalizamos el compromiso social de los empleados de Telefónica a través de acciones solidarias basadas en el voluntariado.
¿Qué innovaciones tecnológicas veremos en los próximos años?
Vamos a conocer un desarrollo espectacular de las tecnologías digitales: la inteligencia artificial y su potencial para simplificar tareas, el internet de las cosas y las decenas de miles de objetos conectados, los robots y sus posibilidades laborales y sociales. Así como la realidad virtual y la realidad aumentada, que ya empiezan a estar presentes en campos distintos del ocio y el videojuego. Precisamente, este último es el tema que centra la Thinking Party o fiesta del pensamiento que celebraremos el 7 de julio en el Espacio Fundación Telefónica de Madrid.
¿Vamos hacia un mundo totalmente digital?
En gran medida ya vivimos en un mundo digital. Las tecnologías están ahí, son potentes y lo van a ser más en el futuro. El reto es usarlas de manera rentable y a la vez generando beneficios para la sociedad y para los grupos de interés. En este sentido, las ciudades son un escenario ideal para llevar a cabo ese reto. Desde Telefónica apostamos por el uso de la tecnología para hacer las ciudades más inteligentes, sostenibles y humanas. Queremos mejorar la calidad de vida de los habitantes de esas ciudades y que la comunicación entre ellos, con los gestores de las urbes y con los sistemas y servicios sea sencilla, bidireccional, productiva y rica.
¿Los españoles estamos preparados?
Sí. En España estamos muy avanzados en diferentes aspectos tecnológicos, lo que facilita la adaptación. La disponibilidad y uso de redes inalámbricas o de fibra óptica y de smartphones nos ponen por delante de muchos países de nuestro entorno y facilitan la puesta en marcha de servicios innovadores, fáciles de utilizar y la adaptación a las nuevas tecnologías.