Ir a un mercadillo hippie en Ibiza no tiene por qué estar motivado por la necesidad de comprar algo. Que algún detalle cae, seguro, porque los hay a montones, y muy interesantes. Pero la decisión de pasear por los mercadillos hippies, por sus puestos, y empaparse de su ambiente no queda limitada al interés de los productos, sino a la atmósfera festiva que se respira en todos ellos.
Los mercadillos son el lugar perfecto para escuchar buena música en vivo
Los mercadillos de la isla se han convertido en un lugar en el que disfrutar de la mejor música en vivo, de una variedad de actividades para los pequeños de la casa y en el espacio perfecto para sentarse a cenar.
La música en directo es uno de los mejores motivos para pasearse por los mercadillos. De diferentes estilos, siempre desenfadados y próximos al público, los grupos marcan el hilo conductor de las jornadas en las que los artesanos muestran toda su ‘artillería’.
Y si los mercadillos han sido siempre un lugar recomendable para ir en familia, ahora todavía más, ya que suelen tener en cuenta a los niños y se organizan talleres a su medida.
La gastronomía también adquiere más protagonismo, y en muchos de estos hippie market se puede comer o cenar una variedad de platos para todos los gustos.