Tras un invierno de obras el Hotel Torre del Mar presentó la última parte de la gran reforma estructural que ha acometido en los últimos años que le sitúa como uno de los mejores hoteles de cuatro estrellas superior de la isla.
La fiesta inaugural, que celebraba también su 45 aniversario, reunió a 300 invitados en las espectaculares terrazas frente al mar de es Viver en una exquisita velada de gastronomía, espectáculo y ocio.
El evento consistió en una réplica de la celebración de incentivos que organiza normalmente para sus clientes; pero en esta ocasión estuvo destinado exclusivamente a las agencias de viajes, proveedores y colaboradores.
Gastronomía y ambiente
Bajo el cielo de una deliciosa noche de primavera, se sirvieron en las mesas distribuidas por la terrazas y jardines, canapés, jamón cortado a mano, sushi y finger food elaborados por el equipo de cocina de los restaurantes del hotel. La fiesta tuvo como colofón el espectáculo de fly board en la famosa piscina junto a la torre de piedra, del dúo The Best Show, formado por el conductor Lindsay del fly board y la saxofonista Anastasia McQueen, que interpretó temas instrumentales en directo suspendida en la piscina.
Arquitectura y diseño
La obra de remodelación de este establecimiento hotelero de la familia Torres Marí ha sido diseñada por el arquitecto Luis Gascón, el arquitecto técnico Claude Lamy y el interiorista Carlos Lafuente.
Se trata de una apuesta por la calidad y la exclusividad en espacios diseñados en diferentes zonas para obtener la máxima privacidad de los clientes en sus 217 habitaciones, 12 de ellas suites exclusivas y el resto con vistas al mar, la playa y Dalt Vila. Dispone de dos restaurantes, el bufé panorámico en el edifico principal y el Resto Bar Miramar en los jardines de la playa, ambos solo para clientes del hotel.
El Salsa Rosa Spa con zona acristalada con vistas al mar y cabina doble para masajes en pareja es otra zona exclusiva. Cuenta también con terrazas de excelente vistas, hamacas, camas balinesas y spa excelence en los jardines y el perímetro de la renovada piscina tipo infinty que se funde con el mar y cuyas aguas emulan el color de ses Salines y logra un efecto único en el que parece que la torre de piedra flota sobre el agua.
Apuesta por el turismo MICE
El Hotel Torre del Mar apuesta por la calidad y el segmento de turismo de convenciones, congresos e incentivos ‘MICE’ para lo que el próximo invierno culminará la construcción de un centro de convenciones de 600 m2 de capacidad, totalmente diáfano, sin columnas y vistas panorámicas; un salón privado de eventos para 200 comensales y el roof top del edificio principal de 500 m2 con impresionantes vistas.