La familia March decidió hace dos años continuar con la tradición de la frutería de Juan Ferrer, un establecimiento emblemático, de los «de toda la vida» basado en una excelente calidad y un servicio excepcional. Así que, antes de que desapareciera la emblemática frutería, añadieron su apellido March al nombre y, sobre todo, continuaron con su buena trayectoria.
Desde su almacén, situado en Sant Antoni, distribuyen frutas y verduras a un gran número de restaurantes y hoteles.
Si algo caracteriza a la amplia gama de frutas y verduras de Juan Ferrer y March es la alta calidad. En sus estanterías se encuentran productos procedentes de la isla, la Península, e, incluso, algunos son de importación.
En su afán por dar el mejor servicio a sus clientes, esta frutería incorpora constantemente las novedades que demandan los cocineros de los restaurantes con los que trabajan