Los astilleros dedicados al fabricar los yates más innovadores y lujos del mundo compiten cada año para lograr uno de los premios del World Superyacht Awards. Los galardones, impulsados por Boat International Media, cuentan con un jurado formado por 20 propietarios de superyates. La entrega de los premios se celebró recientemente en Florencia.
Entre los barcos galardonados destaca el ‘Game Changer’ premiado por las dimensiones de su helipuerto, la capacidad de estiba, las instalaciones hospitalarias, sus cuatro lanchas y su submarino.
El ‘Pink Gin’ de 53,9 metros de fibra de carbono procedente de Baltic Yachts logró los premios al mejor velero de más de 50 metros y al mejor velero del año.
Tecnológicamente avanzado
En la categoría de motovelero el ganador fue el ‘Sailing Yacht A’, construido por Nobiskrug en Alemania, con diseño interior y exterior de Philippe Starck. El propietario de este barco de más de 140 metros se aseguró de que fuera uno de los superyates más avanzados tecnológicamente tanto a motor o a vela y respetuoso con el medio ambiente.
El ‘Telli’, de 33 metros de eslora, impresionó al jurado por su diseño brillante y abierto, así como por el garaje drive-in, y por la decoración interior contemporánea y clásica.
Los espacios al aire libre y la piscina con fondo de cristal que crea un espectacular efecto de luz en el beach club fueron los puntos a favor del ‘Seven Sins’. El interior y el exterior están diseñados por la Officina Italiana Design, que creó un plan contemporáneo y abierto.
El ‘Faith‘, de casi 100 metros, se llevó el galardón al Mejor yate a motor del año. Junto a las innovaciones en diseño y construcción, ofrece algunos detalles como la cúpula acristalada de tres metros de altura en el camarote del armador o el fondo de vidrio curvado de la piscina de 9 metros.
Pista de pádel
El premio especial del jurado fue para el ‘Aviva’ un yate de 98,4 metros que presenta un diseño interior y exterior de Reymond Langton Design. Una de las características más llamativas es la pista de pádel ubicada en el centro de la cubierta inferior, que el propietario, la tripulación y los huéspedes pueden disfrutan a diario. El jurado valoró las líneas modernas, el llamativo color del casco y la decoración interior, y el hecho de que sea un hogar a tiempo completo para el propietario.