La energía renovable es sinónimo de futuro, según los profesionales del sector de la construcción. Se trata de la energía que se obtiene de fuentes naturales virtualmente inagotables, ya sea por la inmensa cantidad de energía que tienen, o bien porque son capaces de regenerarse por vías naturales.
En la actualidad, la mayoría de la energía que consumen los edificios se genera a través del petróleo, el gas natural y el carbón. Las energías renovables suponen una parte mínima, especialmente en Ibiza. «Es algo que hay que ir cambiando -recalca el arquitecto técnico Álvaro Martínez-. Ahora mismo en Ibiza las energías renovables no deben llegar ni al 1%, y es un lugar con mucho sol, ofrece muchas posibilidades».
El ingeniero industrial Vicent Cardona afirma que lo ideal sería que, en las azoteas de todos los edificios, hubiera placas solares, pero todavía queda mucho camino por recorrer para alcanzar esa meta. Existen muchas presiones.
Cambio de modelo energético
El éxito en esta lucha es conseguir que se demande menos energía, en general, porque hay que reducir las emisiones de CO2. ¿Cómo se puede conseguir? «Cambiando el modelo energético, es decir, la fuente que genera la energía, y reduciendo la demanda, lo que necesitas, a todos los niveles: a nivel mundial, país, isla, casa y usuario».
¿De dónde viene la energía? «La luz de tu casa funciona porque, o bien estás quemando gasolina en Endesa, en Ibiza, o porque en Alcúdia están quemando carbón. En Ibiza, un sitio tan guay, donde hay mucho sol, y que la gran mayoría de energía que consumimos venga de un cable tirado por mar de Palma de una central que quema carbón de África es una pena», afirma Martínez.