Son muchas y muy variadas y combinan desde la música rock hasta la Edad Media; pueden ser tapas en un bar en pleno invierno o una matanza de cerdo en mitad de la calle, pero la cuestión y el pretexto es siempre el mismo: potenciar el producto y la gastronomía local.
Ahora, en los meses de verano los productores y restauradores se vuelcan en su trabajo de temporada, pero desde que ésta finaliza allá por el mes de octubre hasta que vuelve a arrancar el mes de junio, se abre un amplio abanico de opciones para conocer, degustar y divertirse con la restauración y gastronomía local. Este año, por ejemplo, el recinto ferial vivió una importante cita con la celebración a finales de febrero de la primera edición de Sabores del campo y la mar, por la que pasaron cerca de 5.000 personas. Allí, se pudo comprobar el auge del producto local, las nuevas prouestas culinarias, a través de interesantes show cooking y todo tipo de degustaciones. Fue un fin de semana completo en el que público pudo apreciar de primera mano la calidad de nuestros productos. Pero además de esta feria, hay otra muchas posibilidades de disfrutar de la restauración y de conocer nuestra gastronomía. Iniciativas como el Cañas and Roll de Sant Josep, el Restaurat, el Pintxa, la Primavera Gastronómica, el Mós-The Route of Tapas de Sant Antoni, el Patrimoni Gastronòmic de Vila, los sábados del Mercat Nou o las Jornadas Gastronómicas del Cerdo de Santa Eulària, entre otras, son propuestas organizadas para atraer a la clientela y dinamizar un sector que fuera de temporada sufre los rigores del invierno, pero que poco a poco está logrando con su empuje convertirse en una interesante oferta alternativa en Ibiza y Formentera.
De puertas para afuera
Restauradores, productores agrícolas y ganaderos, empresarios del sector e instituciones se afanan en promocionar la gastronomía y la restauración local en numerosos eventos a lo largo del año