Ingredientes
1 kg de tomates maduros
1 cucharada de azúcar moreno
1 cucharadita de sal
1 cucharada de tomillo seco + 1 cucharadita extra (al reservar los tomates)
1 cucharadita de pimienta negra recién molida
1 cucharada de vinagre balsámico
2 cucharadas de aceite de oliva
Agua y hielo
Instrucciones de elaboración
Las mermeladas y la fruta fresca han sido, desde siempre, un complemento perfecto para acompañar con quesos. Como dice el refrán «uvas con queso saben a beso», pero hoy @puredepalabras trae una receta para aprovechar esos tomates olvidados en la despensa y preparar un tándem perfecto con una tostada y un poco de queso de cabra. La receta de hoy es tomate confitado casero.
1 Antes de empezar, hay que precalentar el horno a 100ºC para que esté listo cuando haya que hornear los tomates. En primer lugar, hay que realizar un corte en forma de cruz en la punta de 1 kilo de tomates maduros y escaldarlos en agua hirviendo durante 5 minutos.
2 Habrá que tener preparado un cuenco con agua y hielo para reservar durante un minuto los tomates. De ese modo, se pelarán fácilmente.
3 Sobre la bandeja del horno, forrada con papel de horno, colocamos los tomates pelados y les añadimos sal, pimienta negra recién molida, tomillo seco, azúcar moreno, un chorrito de vinagre balsámico de módena y aceite de oliva.
4 Horneamos los tomates a 100ºC durante 40 minutos. Si durante el horneado los tomates se secan, puede añadirse un poco de aceite de oliva y agua para hidratarlos.
5 Cuando los tomates hayan perdido toda su agua y estén totalmente cocinados, hay que sacarlos del horno y dejarlos reposar en aceite de oliva, y tomillo seco durante 20 minutos.
Al servirlos, bastará con escurrir el aceite para que no sean tan grasos, tostar un poco de pan y acompañarlos con el queso que más apetezca. Al ser una preparación dulce y especiada, los quesos que mejor le sientan son aquellos maduros y secos, como el queso manchego o los italianos parmesano y pecorino, pero en caso de encontrar un buen queso de cabra curado, será el mejor aliado para estos tomates confitados.
6 En caso de querer guardarlos, bastará con dejarlos en aceite y en la nevera y aguantarán perfectamente unos días.
7 Y para los amantes de los sabores picantes, estos tomates confitados son perfectos con guindilla picada durante el horneado o confitados en aceite de pimientón picante.
Notas de la Chef
El tomate favorece la cicatrización de las heridas.
El azúcar quita la acidez al tomate.
Producto local: Esta receta ha sido elaborada con tomates de origen ibicenco.