La puesta de largo es una tradicional ceremonia que revive de nuevo entre clases sociales altas donde se festeja la mayoría de edad de un joven con sus familiares y amigos y en la que la etiqueta juega un papel primordial y protagonista. La joven madrileña Marta Pérez-Maura eligió Ibiza para reunir a 180 amigos y familiares procedentes de Madrid, Londres y Estados Unidos y celebrar su puesta de largo. La playa de ses Salines y el restaurante Guaraná fueron el idílico paisaje donde la anfitriona recibió a sus invitados para celebrar por todo lo alto su mayoría de edad. Marta vistió un sencillo y elegante traje de color turquesa del diseñador Diego Estrada y el pelo recogido.
La impresionante decoración creada por el artista Toni Riera, convirtió las instalaciones del restaurante en un jardín a pie de mar con efectos especiales, cientos de velas y luces de leds. El evento contó con un espectacular shows de flyboard de Lindsay y la saxofonista Anastasia, una batucada brasileña y baile de capoeira.