Todos suman. Productores, restauradores, cocineros, profesionales de la alimentación, distribuidores y administraciones han dado un paso al frente en los últimos años para colocar a la gastronomía local en un escalón bien visible, en una plataforma ideal para ser proyectada al exterior como un atractivo más de las Pitiüses.
En 2017 Ibiza y Formentera son sol, playa, música, fiesta, naturaleza, deporte…y gastronomía, gracias al esfuerzo colectivo de un sector al alza. El atractivo es tal que ya se promociona en las ferias turísticas como un gancho más, que entra por los ojos y convence por el paladar.
Este año, el invierno y la primavera han estado repletos de eventos gastronómicos destinados tanto a los profesionales del sector como al público en general, donde el producto ha sido protagonista, desde la sobrasada al gerret,con una especial relevancia para las jornadas ‘Ibiza Sabor’, que durante más de un mes celebró interesantes encuentros culinarios.
El potencial gastronómico de Ibiza se ha convertido en un producto turístico que ya se pasea por las ferias
Organizadas conjuntamente por la Fundación de Turismo del Consell de Ibiza y la Pimeef, en el marco de estas jornadas se celebró también el II Foro Profesional de Gastronomía del Mediterráneo. De esta manera, por la isla desfilaron ilustres cocineros, restauradores y profesionales que dejaron su sello y sus conocimientos en distintas y atractivas sesiones, como los talleres de profesionales de sala o el taller magistral de creatividad con sobrasada.
La quinta edición de estas jornadas contaron con la participación de medio centenar de restaurantes de la isla, que contribuyeron a su manera a dar voz elaborando fantásticos menús degustación a un precio muy razonable.
En estos menús los comensales tenían la posibilidad de degustar desde platos tradicionales como todo tipo de arroces y el bullit de peix, entre otros, a sorprendentes y llamativas versiones más vanguardistas. El trabajo de los chefs pitiusos resulta fundamental en el desarrollo de esta marca, por su compromiso con el producto local y su creatividad.
Citas imprescindibles
Estas jornadas se han consolidado como una cita imprescindible para los chefs y productores, «que están viendo cómo gracias al impulso de Ibiza Sabor se está consiguiendo un efecto mediático hasta ahora desconocido para la gastronomía de la isla», destacaba en su presentación el presidente del Consell, Vicent Torres, que subrayaba que «el principal éxito radica en el posicionamiento de Ibiza a nivel nacional como un destino turístico gastronómico».
Calidad durante todo el año
Ese posicionamiento turístico que a las administraciones locales les trae de cabeza para despegarse la dañina imagen de juerga que provoca el ocio nocturno (y para desestacionalizar) es otro aliciente más para apostar por esta industria de calidad, que se puede consumir fuera de temporada y que, además, potencia la producción de los recursos propios de la isla. Todo en uno.
Peix Nostrum, la marca de las cofradías, contribuye a promocionar el producto local en la calle
Las jornadas no sólo han sido un lugar de encuentro gastronómico, han servido sobre todo a muchos profesionales para tomar nota y recibir consejo de acreditados restauradores, como en el taller de formación de salas celebrado en abril en Atzaró. Lo mismo ocurrió con el taller de innovación de la sobrasada, donde expertos cocineros dieron rienda suelta a la imaginación con este característico producto. Jornadas intensas de conocimiento y encima de carácter gratuito.
Al trabajo de la administración hay que sumar la labor de los profesionales, como las cofradías de pescadores que bajo el paraguas de la marca Peix Nostrum han creado una plataforma ideal para dar a conocer su producto que, en algunas ocasiones como había ocurrido con el gerret, estaba un poco marginado.
De ahí han surgido iniciativas tan atractivas y apetecibles como la Fira del Gerret de Santa Eulària, que este año ha celebrado su tercera edición con un rotundo éxito; la primera Fira de la Llagosta, la Gamba i el Peix de Ibiza que se realizó en Sant Antoni o los Peixets al port, que durante varios domingos de invierno y primavera han animado el barrio de la Marina y le han devuelto su añorado carácter marinero.
La feria del calamar que se celebra en las fiestas de Sant Carles, los concursos de arroces marineros de Vila, el tradicional de paellas de Sant Antoni o las jornadas del porc eivissenc que animan lo inviernos en Santa Eulària son otros de los eventos en los que la gastronomía local sale de la cocina para mostrar toda su riqueza en la calle.