Una gran terraza con espectaculares vistas al mar y la puesta de sol son dos ingredientes fundamentales para que las parejas pueden celebrar su enlace, el cóctel de bienvenida a sus invitados o incluso el banquete en el Hotel Blau Parc. Si a estos dos valores se añade su cuidada gastronomía, el resultado es que la celebración resulta perfecta. Y es que muchos novios prefieren los espacios exteriores, donde disfrutar de la buena climatología de Ibiza y presenciar uno de los atardeceres más bonitos de la isla.
Para celebraciones más pequeñas (de hasta 100 comensales; en Blau Parc puede haber hasta 300), es posible escoger el restaurante Ample 32. Su impresionante terraza suspendida ofrece unas vistas de impacto, por supuesto con un servicio de alto nivel acorde a un evento tan importante como una boda.
La propuesta gastronómica parte de los sabores tradicionales del Mediterráneo para fusionarlo con otras cocinas del mundo en creaciones exclusivas. Con una gran experiencia, logra seducir a todos los paladares con unos platos minuciosamente elaborados y presentados de forma excepcional.
Con el fin de que los novios estén seguros de su elección, pueden acudir acompañados a hacer las pruebas de menú. Allí degustarán los platos elegidos y podrán hacer después variaciones de cara al menú nupcial.
El Hotel Blau Parc regala a los recién casados una noche en sus habitaciones, y además ofrece descuentos especiales a los familiares que reserven alojamiento en el establecimiento.