—¿Qué novedades han incorporado este año?
Cualquier sector relacionado con la medicina va experimentando cada año un montón de actualizaciones en cuanto a procedimientos y tecnología. No podemos concebir el ejercicio de la profesión sin hacer el esfuerzo necesario para actualizar tanto el equipo tecnológico como la formación de los profesionales. Por ejemplo, este año hemos incorporado un escaner intraoral (dispositivo de alta tecnología que nos permite la toma de moldes de la boca sin el uso de las incómodas pastas que habitualmente se coloca). También ha empezado a trabajar con nosotros un odontólogo residente. El Consejo General de Dentistas ha puesto en marcha la excelente idea de permitir a los odontólogos la formación de especialista con un formato tipo MIR, nuestra clínica es la única de Balears que cuenta con un residente, lo cual nos supone un gran orgullo.
—¿En qué proyectos están involucrados actualmente?
En cuanto a la formación, seguimos organizando tanto estancias clínicas, como cursos regulares para la formación de profesionales. Supone una enorme satisfacción recibir doctores de todo el mundo, que deciden Ibiza como lugar para aprender, perfeccionar o adquirir nuevas técnicas en su práctica clínica. En el campo del diseño también hemos desarrollado dispositivos para la correcta colocación de los implantes dentales, que ya están validados y se hayan en el mercado internacional. Así como una línea de implantes cigomáticos que pronto verán la luz.
—¿Qué opinión tiene de las franquicias y de las clínicas low cost?
Es un terreno pantanoso, donde lo fácil es salir manchado, cuando no escaldado o denunciado. Pero no me asusta decir que tienen mala prensa en general, aunque la publicidad parece ejercer su efecto. No tengo nada contra el concepto general, lo que no concibo es el mercadeo del falso regalo, del riesgo de la financiación externa a la clínica a ciegas y de las sobreindicaciones. Todos los profesionales tenemos el mismo grado de responsabilidad para nuestros pacientes y no por pertenecer a tal o cual empresa se nos puede eximir de nuestros deberes. Yo sólo les diría (a los pacientes) que se pasaran dos días en cualquiera de esas clínicas y el mismo tiempo en otra, y que entonces podrían percibir las diferencias. Estoy seguro de que si eso fuera así, se acabarían las diferencias y las publicidades engañosas.
—¿Dientes o implantes?
Sin lugar a dudas los dientes superan con creces a los implantes. Quitar un diente sano o conservable, es una decisión que ha de ser sumamente meditada, contrastada con el paciente, y tomada de forma prudente. Lamentablemente muchas situaciones son más laboriosas y complejas de resolver con dientes que con implantes. Pero considero que las clínicas que adoptan criterios extraccionistas (quitar dientes conservables y poner implantes) se equivocan y hacen un daño muy serio a la profesión, pero por encima de todo a los pacientes. Y eso es algo que me duele en mis adentros.
—¿Qué técnica prefiere la regeneración ósea o los implantes a distancia?
Me gustan ambas por igual. Quizá me de más satisfacción la regeneración, pero al paciente le ocurre lo contrario. La idea es adaptarse siempre a las necesidades del paciente, pero también tengo clarísimo que se debe hacer lo que el profesional indica, y no lo que el paciente considera, desde luego teniendo siempre en consideración sus inquietudes, deseos y opiniones.
—¿Por qué ha apostado por disponer de un quirófano de CMA (Cirugía Mayor ambulatoria) en su consulta.
Pues muy fácil. Porque si no, no se puede hacer todo lo que estamos haciendo. La mayoría de los pacientes y lamentablemente muchos profesionales consideran que la boca es un medio muy tolerante a las infecciones, pero nuestra actitud es disminuir al máximo el riesgo de infecciones, tanto entre pacientes, como entre profesionales. El mundo de la regeneración ósea es sumamente exigente, en cuanto a las medidas de asepsia se refiere. Creo que todo nuestro esfuerzo justifica el hecho de que se evite una infección en cualquier paciente.