¡Arrepentirse es humano! No todos lucen o presumen de tatuajes. Ya sea porque ya no gustan o por su mal estado, muchas veces uno se avergüenza y trata de taparlos u ocultarlos.
Quien esté pensando en borrar ese tatuaje que ya no gusta, está de enhorabuena ya que existe la manera de eliminarlo de forma segura, eficaz y en pocas sesiones. Eiviestetic cuenta con un láser de última generación que, a través de pulsos muy cortos, fragmenta la tinta del tatuaje para convertirla en pequeñas partículas que, a las semanas, el cuerpo procesa.
Preparación para el tratamiento
Es necesario evitar las lámparas solares y la exposición al sol durante al menos un mes antes de la sesión. También, hay que tener cuidado y usar protectores solares.
Una sola sesión no alcanza
Es importante tener en cuenta que el número de sesiones requeridas no se pueden predecir en una primera consulta, ya que depende de muchos factores, como el tamaño, la localización, la profundidad o el color del tatuaje o lesión pigmentada.
Cada sesión dura entre 10 y 30 minutos y, normalmente, con cinco u ocho sesiones son suficientes.
Tiempo entre sesiones
El tiempo de inactividad entre sesiones es un factor clave. Aplicar otro tratamiento con láser demasiado pronto puede aumentar el riesgo de algún efecto secundario como irritación de piel. El tiempo de promedio entre cada sesión es de cuatro a seis semanas, aunque es necesario consultar a un especialista porque cada caso es único.
Efectos secundarios
Inmediatamente después del tratamiento la piel puede mostrar una decoloración y el área alrededor del tatuaje o lesión pigmentada puede quedar enrojecida o inflamada. Es normal y desaparece en poco tiempo.
¿Es doloroso el tratamiento?
El paciente puede percibir una sensación muy similar al golpe de una banda de goma en la piel. Esta molestia tolerable podría disminuir por el uso de un sistema de enfriamiento en la piel, así como por la aplicación de un anestésico tópico o local.