“–En agosto había 1.120 turistas exactamente en esta villa.
–¿Total?
–Desde enero ha habido por aquí… Calculamos unos 2.300 ó 2.400 aproximadamente.
–¿Hoteles y sitios de alojamiento con que San Antonio cuenta en la actualidad?
–Cinco hoteles, una pensión y dos fondas.
–¿Qué haría Vd. para incrementar el turismo?
–Aumentar las vías de comunicación entre Ibiza y la Península, de forma que con Barcelona hubiese por lo menos dos correos semanales, y crear un servicio aéreo entre Ibiza y la Península o Palma.
–¿Cree que de verdad son necesarios?
–Indudablemente, porque, si no, resulta que el turismo queda enfrascado no pudiendo venir y marchar cuando él quiera. En agosto aquí faltó alojamiento y se dio el caso de tenerse que alojar muchos en casas particulares; claro está que eso sólo pasa con los que no solicitaron previamente su plaza.
–Y ésos ¿se fueron satisfechos?
–Sí. Es que aquí se procura ser amable con todos. Recuerdo un caso de un matrimonio madrileño que hubieron de instalarse en una casa particular. Sin embargo, se fueron contentísimos.
–¿Beneficios del turismo?
–De unos 2 a 3 millones de pesetas de las que se beneficia todo el pueblo, incluso los agricultores. La clase obrera tiene una cantidad de trabajo muy grande. A San Antonio vienen turistas también a invernar, ya que esto es una estación adecuadísima por el clima y por todo.
–¿Problemas municipales?
–La conducción de aguas, el alcantarillado urbanización de la zona de ensanche de Cala Grasió y de la falda de La Atalaya y Bosque den Frit en vías de tramitación. Otro proyecto es el traslado del cementerio al sitio denominado cueva de Santa Inés, pues el antiguo queda enclavado en el nuevo plan de urbanización”.
(Texto original)
Diario de Ibiza.
22 de septiembre de 1951
