“Este pueblo, el de las hermosas perspectivas marítimas, celebró ayer domingo su tradicional y siempre animada fiesta de San Bartolomé.
Concurrió inmenso, variado gentío de todas las parroquias de la isla; de la ciudad fueron igualmente diversas personas de ambos sexos, que no temieron exponerse á los rigores de un viaje caldeado por un sol capaz de fundir los sesos al más acéfalo. El pueblo estaba alborozado. Los grupos de forasteros, discurriendo por las calles y solicitando acomodo para la hora grave de la pitanza; el entrar y salir de carros y carruajes; los puestos de las obligadas rifas de turrón haciendo en realidad su agosto; los balcones atestados de garridas payesas; blanco de los fervores eróticos de los galanes; el repique de las campanas; los sones de la campestre música, todo, en fin imprimía al arrabal aquel carácter propio de nuestras sencillas alegrías populares”.
(Texto original)
El Correo de Ibiza.
25 de agosto de 1902